Armando Iachini: Kit-Haus, un nuevo sistema de construcción de casas modulares
Las construcciones
modulares se han puesto muy de moda como una alternativa
económica y versátil. Kit-Haus es una de las alternativas de este estilo, que se basa en la edificación de viviendas bastante
simples, compuestas por los elementos necesarios de ensamble e instalación
rápida.
Armando Iachini especifica que la producción industrializada de las partes hace que los costos de estas viviendas sean relativamente bajos. En la mayoría de los casos, este sistema de construcción es ideal para afrontar proyectos pequeños, como un estudio o una pequeña casa vacacional.
En el caso de los proyectos más ambiciosos, que comprenden una vivienda más espaciosa, Kit-Haus puede ser una alternativa viable, pero para ellos es necesario ensamblar una gran cantidad de módulos. El sistema de construcción está basado en la técnica M.H.S., que emplea metal liviano (como por ejemplo el aluminio), para la creación de la estructura.
A pesar de que los módulos suelen ser livianos, la técnica de construcción M.H.S. garantiza solidez, además de ciertas ventajas sobre las prácticas convencionales. El sistema es innovador y versátil, y requiere de gran creatividad e ingenio para sacar el máximo provecho de las alternativas modulares.
Al momento de ensamblar una vivienda concebida por el sistema Kit-Haus, los módulos suelen realizarse en el sitio de la instalación, y es una tarea que solo toma algunos días. Debido a que son piezas livianas, cada uno de los elementos que componen cada sistema modular pueden ser trasladados sin necesidad de contratar un servicio de transporte pesado.
Una de las piezas fundamentales de este sistema es el perfil de aluminio por extrusión M.H.S., que permite al constructor usar sus cuatro lados, haciendo posible la adición de uno o más módulos.
Este sistema hace posible la economía de recursos, ya que con el empleo de cuatro postes y ocho vigas, puede crearse un espacio habitable o la base de una estructura que pueda crecer de forma modular, permitiendo la creación de más ambientes cerrados.
Los resultados que pueden obtenerse de este económico y sencillo sistema de construcción son verdaderamente sorprendentes.
Por Armando Iachini
Armando Iachini especifica que la producción industrializada de las partes hace que los costos de estas viviendas sean relativamente bajos. En la mayoría de los casos, este sistema de construcción es ideal para afrontar proyectos pequeños, como un estudio o una pequeña casa vacacional.
En el caso de los proyectos más ambiciosos, que comprenden una vivienda más espaciosa, Kit-Haus puede ser una alternativa viable, pero para ellos es necesario ensamblar una gran cantidad de módulos. El sistema de construcción está basado en la técnica M.H.S., que emplea metal liviano (como por ejemplo el aluminio), para la creación de la estructura.
A pesar de que los módulos suelen ser livianos, la técnica de construcción M.H.S. garantiza solidez, además de ciertas ventajas sobre las prácticas convencionales. El sistema es innovador y versátil, y requiere de gran creatividad e ingenio para sacar el máximo provecho de las alternativas modulares.
Al momento de ensamblar una vivienda concebida por el sistema Kit-Haus, los módulos suelen realizarse en el sitio de la instalación, y es una tarea que solo toma algunos días. Debido a que son piezas livianas, cada uno de los elementos que componen cada sistema modular pueden ser trasladados sin necesidad de contratar un servicio de transporte pesado.
Una de las piezas fundamentales de este sistema es el perfil de aluminio por extrusión M.H.S., que permite al constructor usar sus cuatro lados, haciendo posible la adición de uno o más módulos.
Este sistema hace posible la economía de recursos, ya que con el empleo de cuatro postes y ocho vigas, puede crearse un espacio habitable o la base de una estructura que pueda crecer de forma modular, permitiendo la creación de más ambientes cerrados.
Los resultados que pueden obtenerse de este económico y sencillo sistema de construcción son verdaderamente sorprendentes.
Por Armando Iachini
